EN NUESTRAS MANOS.

Antes que nada quiero comenzar estas líneas con una frase del ya fallecido físico teórico británico Stephen Hawking que dice: "Incluso la gente que afirma que no podemos hacer nada para cambiar nuestro destino, mira antes de cruzar la calle". Nosotros mismos abonamos el camino que queremos pisar, pero antes de eso debemos tener claro la hoja de ruta que queremos emprender, tan fácil como dice el adagio popular "el que ensilla el caballo, sabe para donde va". Encontré esa frase en la red social Twitter, y se vinieron muchas cosas a la cabeza... en que estamos capacitados para hacer las cosas que a uno mismo le cree conveniente, si es la voluntad de DIOS, luchar por los sueños, arraigarse a los anhelos y deseos de nuestro corazón, si no tenemos una ilusión, por más pequeña que sea, no me explico como podemos estar en este mundo. En nuestras manos está la manera de hacer acciones diferentes que por muchos años se venían haciendo, que en su momento se volvió cotidiano, que era el pan de cada día, pero lastimosamente los tiempos han cambiado. Ya no podemos tener la misma percepción de la vida social de nuestros padres, quieremos cosas diferentes, algo que nos motive a luchar para poder darle algo mejor a nuestros hijos. Estamos en un mundo con cambios vertiginosos, y en donde los jóvenes pretendemos y quieremos estar más enfocado a los diferentes paradigmas de la vida en sociedad, para darle el color diferencial a los procesos. Pero como son procesos, lleva mucho tiempo en verse el resultado, y es por eso que se debe de tener mucha calma, mucha paciencia para llegar al objetivo final. A groso modo, somos llamados a ser la generación del futuro, debemos capacitarnos para ser competitivos, para estar a la vanguardia de la oferta de la globalización, para poder como responder al llamado, estar fundamentados, tener bases. Lucha por los deseos de tu corazón, no desmayes, falta poco... confía plenamente en DIOS que el momento está cada vez más cerca.